Si algo hay que tener presente es que se puede considerar egoblog a cualquier blog, sea de la temática que sea. Tan solo hace falta que sea personal. Y es este punto el que lo hace especial o “egocéntrico”. Será, en todo caso, su personalidad la que me llame a seguirlo o no. Lo que sí es cierto que los egoblogs y sus egobloggers suelen adjudicarse a blogs de moda. Pero debe quedar claro: ni todos los blogs de moda son “egoblogs”, ni todos los “egobloggers” deben ser necesariamente de moda.
En todo caso, para Jesús Martín, experto en moda, “desde hace unos años, el despegue del mundo egoblogger es imparable y, lo que empezó como algo nuevo, refrescante, necesario y entretenido, se ha convertido en algo trillado, predecible y aburrido, por lo que parece que es momento de pasar página”. Por tanto, cabe preguntarse si realmente hay mercado para tanta egoblogger. Es más, ¿las marcas de moda, que han apostado por este tipo de bloggers para dar a conocer su género, deberían plantear cambiar de estrategia?
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